Julio 14 de 2025
El Gobierno nacional entregó una granja solar en el municipio de Arroyohondo, Bolívar, con el objetivo de suministrar energía eléctrica a 500 hogares de estratos 1 y 2. Hace parte del proyecto Energía Solar para Población Vulnerable de la política de Transición Energética Justa, adelantada por el Ministerio de Minas y Energía con el acompañamiento y ejecución del Fenoge.
La granja, de acuerdo con la información entregada, tiene una capacidad instalada de 1.102 kilovatios pico (kWp), y está compuesta por 1.792 módulos fotovoltaicos de alta eficiencia, con inversores de última generación y un sistema de monitoreo digital que permite un control más eficiente de la operación.
Tiene una vida útil de hasta 20 años y generará, según las estimaciones hechas, aproximadamente 1.9 millones de kilovatios hora (kWh) al año, suficientes para atender el consumo de 500 familias de la población y otras instituciones como el hospital y centro de salud.
“Instituciones como hospitales, escuelas, bibliotecas y acueductos también reducirán sus costos de energía, permitiendo que esos recursos se destinen a programas sociales clave para la comunidad. Además, el 85 % del personal vinculado durante la ejecución fue mano de obra local, lo que generó ingresos directos y dinamizó la economía del municipio”, afirmó Ángela Álvarez, directora ejecutiva del Fenoge.
La directiva resaltó esta iniciativa que no solo pone en marcha una infraestructura, sino que además -según dijo- trae “dignificación a la gente”.
“La comunidad será capacitada en la operación y el mantenimiento de los sistemas solares y en el uso eficiente de la energía, asegurando que esta transformación sea sostenible, propia y duradera”, aseguró.
Asimismo, la granja solar permitirá ahorrar la emisión de 1.300 toneladas de CO2 en el primer año de operación, equivalentes a plantar 19.40 árboles adultos.
“El acceso a la energía no puede ser un privilegio, debe ser un derecho. Por eso nace Colombia Solar: para llevar energía limpia a quienes más lo necesitan. Pensamos en los territorios de la Colombia profunda y en sus economías; en esas familias que hoy deben elegir entre pagar el recibo de energía o comer. Brindarle acceso a la energía limpia es ofrecerles oportunidades, tranquilidad y un servicio con tarifas que realmente puedan asumir”, apuntó Edwin Palma, ministro de Minas y Energía.